domingo, 2 de agosto de 2020

Asombrosas verdades sobre animales marinos eléctricos

Función de los peces eléctricos 

En el interior de los peces eléctrico, los órganos están con­trolados por núcleos de neuronas medulares interconectadas entre sí. La interconexión es un elemento imprescindible para garantizar la activación y la descarga sincrónica de todas las neuronas implicadas. Así, millones de electrolitos localizados a distancias variables del centro de control pueden activarse de forma simultánea, provocando una considerable descarga eléctrica en muy poco tiempo. Esto se traduce en una capacidad de respuesta óptima del animal ante una amenaza o una presa que son capaces de generar pequeñas descargas eléctricas mediante reacciones químicas complejas. Pero los peces no son los únicos animales eléctricos. Varias otras especies detectan o generan electricidad para una variedad de propósitos. A pesar de su nombre y la serpentina apariencia, la anguila eléctrica no es una anguila en absoluto

Anguila eléctrica

Las anguilas eléctricas pueden crecer hasta más de ocho pies de largo y pesar cerca de 50 libras. Pueden generar electricidad suficiente para encender un foco. Cada 25 segundos, esta especie es capaz de generar impulsos eléctricos de hasta 600 voltios, cinco veces el voltaje de una toma de corriente estándar. Las muertes humanas con encuentros con una anguila eléctrica son raras, pero han ocurrido. Choques repetidos pueden causar insuficiencia respiratoria y cardiaca, y ha habido personas que se han ahogado después 

Raya eléctrica 



Las rayas son capaces de detectar campos eléctricos y también pueden producir electricidad. Hay 69 especies de rayas eléctricas que se encuentran en todos los océanos del mundo y que varían en tamaño desde tres pies (0,9 metros) de ancho a aproximadamente el tamaño de un plato de comida. La tensión que producen varía con su tamaño, con los rayas más pequeños que generan menos de diez voltios y los más grandes capaces de producir hasta 220 voltios, pueden tardar varios días en volver a cargar la (batería de células) que tiene bajo la piel para realizar nuevas descargar.

El uranoscopidae 



Los uranoscopidae tienen una apariencia muy fea, con un cuerpo aplanado y  su cabeza grande en la que se encuentra sus ojos, miden de 20 a 90 centímetros. Los uranoscopidae poseen dos grandes espinas venenosas detrás de las branquias y por encima de las aletas pectorales que pueden causar descargas eléctricas. Se encuentra en la parte inferior de las aguas profundas. Para cazar a su presa, se entierra en la arena, dejando fuera sus ojos. Cuando pasa una presea, el pez abre su boca enorme y aspira los peces desafortunados

Pez Elefante

El pez elefante produce unos pequeños impulsos eléctricos, que crean un campo eléctrico entorno al pez. La electricidad se genera gracias a un tejido muscular que posee en el pedúnculo caudal. Estos impulsos le sirven para evitar ser devorado por su depredador  y también para perseguir  a su presa en el agua turbia o durante la noche, aunque también sirve para reconocer  a otros individuos de su especie, encontrar pareja y orientarse.



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